viernes, 1 de enero de 2010

Reflexión II

Ya cambiamos de año y a pesar de que hay días en que me siento bien, eso no implica que la pena siga ahí. Extraño a mi abueli, sobretodo en estas fechas, en las que la pasábamos juntos. El tiempo te golpea y bien fuerte, no por el hecho de volverse más viejo, sino por lo que eso implica, el tiempo fue arrebatando paulatinamente a la abuela que yo conocí, para finalmente dar el golpe de gracia, el consuelo que me queda es que fue rápido y ella no sufrió mucho. Aún así siento su presencia y el cariño que nos tenía, siento que nos protege de una u otra forma. Ella me consiguió el pasaje para La Ligua desde Santiago, porque me reservó el único pasaje que quedaba (quizás quedaban más, pero en la otra boletería en que pregunté, estaban agotados) desde Santiago hasta Calera, porque lo compré faltando 1 día para el año nuevo (el 30 de Diciembre), y porque me cuido y protegió (y espero que siga haciéndolo, güeli, aún quedan Enero y Febrero, así que no se puede echar para atrás ¬¬) los primeros días que tuve que andar sola por Santiago, y tener que luchar con las combinaciones del tren (bueno, es el metro, pero a mi me gusta llamarle tren) y no perderse en el intento. Gracias güeli por no hacer de esta experiencia un caos, aunque sigo odiando a Santiago, principalmente por el calor y la multitud de la gente, y espero tener la suerte de encontrar un trabajo en la región de Valparaíso, cerca de mi Ligua natal, así como tú quisiste regresar siempre a La Cruz y nunca se marchó de tus recuerdos.
Lo siento abueli, por tantas cosas que no te pude decir, por no ser una buena bisnieta, por pensar en mi antes que en los que me quieren, ya no vale la pena decir lo que digo, perdí mucho tiempo y no estuve a tu lado. Ya es tarde para que me enseñes pero aún puedo aprender de ti.

Un beso

Jqro

Publicado en conjunto con http://jqro.wordpress.com